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lunes, 26 de octubre de 2015

El Bhagavat Gita

Nadis, Chakras, Kundalini

Nadis
El cuerpo físico está conformando según la naturaleza del cuerpo astral. El cuerpo físico es algo así como el agua, es decir, la forma gruesa, mientras que el cuerpo astral corresponde al vapor o a la forma sutil. De igual modo que el vapor está en el agua, el cuerpo astral, o Sukshma Saríra, está dentro del cuerpo físico. El cuerpo físico no puede hacer nada sin el cuerpo astral. A todo centro físico del cuerpo le corresponde su centro astral.

Los Nadis son los nervios psíquicos o tubos astrales por los que circula el Prana. Están hechos de materia astral y es a través de ellos por donde se mueve o fluye la fuerza vital. Pero debido a que estos Nadis están hechos de materia astral, no pueden verse con los ojos físicos, ni se puede hacer ningún tipo de experimento de laboratorio con ellos en el plano físico. Estos Yoga nadis no son los nervios, arterias y venas ordinarios que conoce la ciencia médica, o Vaidia Shastra, sino algo muy distinto.

El cuerpo tiene incontables Nadis. Así como la hoja del árbol Asvattha está cubierta por fibras diminutas, así también este cuerpo está surcado por millares de Nadis.
Todos los Nadis del cuerpo parten del Kanda, que significa bulbo. El Kanda es la raíz de todos los Nadis, el centro del cuerpo astral, y se encuentra a dos dedos sobre el ano y a dos dedos por debajo de los órganos genitales. Tiene forma de huevo de ave, de unos cuatro dedos de longitud. De este Kanda parten setenta y dos mil Nadis. De este número son común y generalmente conocidos tan sólo 72.

Los principales nadis son diez, a saber: Ida, Pingala, Sushumna, Gandhari, Hastijivha, Pusa, Yasasvini, Alambusa, Kuhuh y Sankhini. Los Yoguis deben conocer perfectamente a los nadis y chakras.

De todos los Nadis que parten del Kanda los más importantes son Ida, Píngala y Sushumna. De los tres, Sushumna es el principal y se extiende desde el Muladhara Chakra hasta Brahmarandhra. Es el más elevado y buscado por los yoguis, pues los demás Nadis están subordinados a él.
La anatomía admite que hay un canal central en la columna vertebral, llamado canalis centralis, cuyo nervio está formado por materia cerebral gris y blanca. El mismo nervio espinal cuelga suspendido en el hueco de la columna vertebral, estando dividido en varias secciones sutiles y siendo de color rojo fuego.


Dentro del Sushumna hay un nadi llamado Vachra, que es lustroso como el sol y tiene cualidades rayásicas. Dentro de este Vachra Nadi se halla, a su vez, otro Nadi llamado Chitra, que es de naturaleza sáttuica y de color pálido. Dentro de este Chitra hay un canal muy fino y delgado, conocido como el Brahma Nadi, a través del cual asciende la Kundalini desde el Muladhara hasta el Sahasrara al ser despertada. En este Nadi se hallan los seis Chakras o lotos.

Ida y Pingala


Existen dos corrientes nerviosas situadas a los lados de la columna vertebral. La izquierda se llama Ida y la derecha Pingala. Las dos son nadis.
Algunos lo interpretan como el sistema nervioso simpático de derecha y de izquierda, pero lo cierto es que se trata de conductores sutiles del Prana. La luna se mueve en Ida y el sol en Pingala. Ida es fría y Pingala caliente.

Ida fluye a través de la fosa izquierda y Pingala por la derecha.

El aliento fluye alternativamente, una hora por cada fosa. 
Mientras el aliento fluye a través de Ida y Pingala, el hombre se halla plenamente ocupado en sus actividades mundanas.
Cuando Sushumna opera, el hombre muere para el mundo y entra en Samadhi.
 El Yogui trata de alcanzar su mejor nivel tratando que su Prana corra por el nadi Sushumna, conocido también como el Brahmanadi central.
 Ida está situado a la izquierda del Sushumna y Pingala a la derecha. 
La luna es de naturaleza Tamásica y el sol de naturaleza Rajásica.
El veneno es solar, el néctar lunar .
Ida y Pingala indican tiempo. Sushumna es el disipador del tiempo.
Sushumna
El Sushumna es el nadi más importante. Es el Sustentador del Universo y el sendero de salvación. Este nadi se halla situado atrás del ano; está ligado a la médula espinal; se extiende hasta el Brahmarandhra y es invisible y sutil.
El real trabajo del Yogui empieza cuando el Sushumna entra en función. El Sushumna corre por la parte central y a lo largo de la médula espinal.
Los nadis Ida, Pingala y Sushumna son los conductores del Prana; sus Devatas son: la luna, el sol y Agni, respectivamente.


Ciertas técnicas de Yoga tratan primero de purificar los Nadis, lo que hará que se abra el Sushumna, el cual permanece generalmente cerrado en todas las personas de mentalidad mundana.
Cuando entramos en meditación , se trata de que el Prana se mueva en el Sushumna.
Es en este momento que se entra en profunda Dhyana. Así que la enroscada energía Kundalini se eleva a lo largo del nadi Sushumna, chakra por chakra, el Yogui logra diferentes clases de  experiencias, poderes y Ananda.

Chakras

Los Chakras son plexos o centros de Sukshma Prana que se encuentran en el Sushumna Nadi. Todas las funciones del cuerpo están bajo el control de estos centros. Los Chakras son centros sutiles de energía vital. Son los centros de Chaitaña, o la consciencia. Los Chakras permanecen en el cuerpo astral incluso después de la desintegración del organismo físico tras la muerte.
Estos Chakras o plexos sutiles se corresponden con los plexos nerviosos situados a lo largo de la columna vertebral en el cuerpo físico. Por ejemplo, el Anahata Chakra tiene su centro correspondiente en el cuerpo físico en el Plexo Cardiaco. Cada Chakra controla y regula un determinado plexo en el cuerpo físico.

Los nervios y plexos psíquicos están estrechamente relacionados con los sutiles. Debido a ello, las vibraciones producidas en los centros físicos por determinados métodos producen el efecto deseado en los centros astrales.

Los siete chakras


El personaje Blanca Nieves es el ser iniciado; el cuento inicia con la muerte de su madre al dar a luz, llevándose todo su pasado, lo que representa el olvido al encarnar en el plano material.
El espejo es la Conciencia, él refleja la realidad, traduciendo el verdadero contenido del corazón de la Reina, que desea el fin de Blanca Nieves, la muerte de la pureza.
Blanca Nieves entonces huye al Bosque, lo que representa el interior de cada uno.
En este camino encuentra los elementos (chakras) y maneja sus energías representadas por los Siete Enanos.
1) Maestro Sabio representa el Chakra Corona (Sahasrara). Es el jefe, la conciencia espiritual.
2) Gruñón es el chakra frontal (Ajna), que representa el pensamiento, el racional.
3)  Feliz representa el chakra garganta (Visuddha), es comunicativo, alegre.
4) Dormilón, representa el chakra cardíaco (Anahata). Este chakra es el puente entre las energías densas y sutiles; aunque perezoso, Siesta es la guía del carro que lleva las joyas de la mina hasta el Maestro.
5) Tímido representa el chakra plexo solar (Svadhishthana). Es el enano más sensible a la información, siempre está tímido y sentimental.
6) Mocoso representa el chakra sacro (Manipura). Es el chakra responsable del sistema inmunológico, es afectado por un problema alérgico.
7) Mudito es el chakra raíz (Muladhara). Es el más joven de los enanosa, el inicio. El primer chakra a trabajar.

En el cuento, Mudito fue el primero en ver Blanca Nieves. 
Blanca Nieves conquista a los siete enanos, domina los chakras.
Eso atrae a tí un gran enfrentamiento, el lado oscuro surge trayendo desafíos.
La Reina, disfrazada de bruja, representa esa fuerza inconsciente.
La manzana es el conocimiento, probarla significa saborear la Dualidad; experimentar la muerte dentro del esoterismo significa la muerte iniciática.
Si recuerdas los enanos ponen un ataúd de vidrio, a Blanca Nieves, lo que significa que está atrapada en sí misma.
Cuando surge el Príncipe, y se integra a la historia trae una figura hasta entonces indiferente en la historia.
El Príncipe simboliza la energía masculina (Yang), que es activa y objetiva. El beso es el encuentro del Yin y del Yang, sol y luna. A través de él, el Despertar sucede y Blanca Nieves se conquista a sí misma, convirtiéndose en INTEGRAL.
Kundalini

Kundalini es el poder serpentino o adormecido Shakti; tiene 3 y ½ vueltas y está ubicado en el Chakra Muladhara, en la base de la columna vertebral, mirando hacia abajo. El estado de Samadhi no es posible, si previamente no se logra su despertar.
Mediante la práctica del Kumbhak en el Pranayama, se produce calor. Por este calor el Kundalini despierta y se dirige hacia arriba a lo largo del Sushumna nadi.
Los practicantes de Yoga experimentan aquí diversas visiones. El Kundalini pasa entonces a través de seis chakras y se une con el Señor Siva, sentado en el Sahasrara o loto de los mil pétalos, situado en la corona de la cabeza. En este momento se produce el Nirvikalpa Samadhi y el Yogui logra la liberación y todos los divinos Aishvaryas.
Será menester practicar el control del aliento y la concentración mental. El Kundalini, una vez despertado y conducido hasta el Chakra Manipura, puede descender nuevamente hasta el Muladhara. En este caso se debe, mediante un renovado esfuerzo, levantarlo otra vez. Pero hay que tener muy en cuenta que, antes de intentar el citado despertar del Kundalini, el practicante debe despojarse de todo deseo y estar pletórico de Vairag. El Kundalini es igual a un filamento muy resplandeciente. Cuando despierta, produce un sonido sibilante como el de una serpiente azuzada por un palo, penetrando por el agujero del Sushumna. Cuando atraviesa los Chakras, capa tras capa de la mente, deviene abierta y el Yogui adquiere diversos Siddhis (Poderes Psíquicos) .


Fuente: http://kriyayogahamsa.blogspot.com.ar/2011/01/nadis-y-los-chakras-un-conocimiento.html



44 ....aquél que en verdad desea conocer el Yoga va más allá de las palabras de los libros.
46. ¡Oh, Arjuna, sé tú un Yogui! Porque el auténtico Yogui va más allá que aquéllos que sólo siguen el sendero de la austeridad, o de la mera sabiduría o de la mera acción.
47. Y el más grande de todos los Yoguis es aquél que tiene una fe total e incondicional y que con toda su alma me ama a Mí.
Capítulo 6. La Meditación.Bhagavad Gita

viernes, 9 de octubre de 2015

Síntesis de los Yogasutras de Patánjali

Los “Yogasutras” fueron escritos originalmente en sánscrito y se conservan copias del texto original que han sido motivo de numerosas traducciones a las cuales se les añadió, posteriormente, un comentario alusivo a cada aforismo. Los “Yogasutras” comentados, a su vez se convirtieron en textos clásicos; un ejemplo destacado es la traducción y comentario de Vyasa. No es de extrañar este hecho que se origina en la fascinante atracción que ejercen los Yogasutras” en el lector estudioso; sin embargo, ese fenómeno alcanza proporciones inesperadas a partir del interés por el Yoga, despertado en occidente, donde existe una cantidad considerable de traducciones con comentarios publicados igualmente por académicos y representantes de sectas o cultos espirituales.
Los sutras o aforismos han sido muy populares en oriente para expresar y conservar por escrito las verdades de la tradición oral. Tienen la particularidad de sintetizar una gran cantidad de significado en una sentencia de unas cuantas palabras.
La palabra sutra  significa literalmente hilvanar, urdir: mediante los sutras se teje, uno a uno, el significado de las verdades trascendentes. Esta particularidad hace de los sutras una herramienta de enseñanza, así como objeto de estudio y memoria del conocimiento, a la vez que permite conservar con mucha fidelidad la pureza de los textos.
Los “Yogasutras” están formados por 183 aforismos (Gardini menciona 196) divididos en cuatro capítulos o partes (pada) que describen las metas, práctica, perfecciones y liberación que procura el Yoga.
Cada uno tiene un título, el cual, si bien expresa la idea fundamental, no agota la gama de los temas tratados.
Existe una lógica rigurosa en la exposición de las secciones y en la síntesis final, pero no siempre la sucesión de las partes obedece al mismo criterio.
El tema de la concentración vuelve en todos los capítulos. Las etapas antes de llegar al trance último, están examinadas distintas veces.
El contenido del segundo capítulo, lógicamente, debió haberse colocado antes, ya que trata los actos previos al control de la mente, examinados en el primero.
Parece que el autor o el redactor final, adoptó el estilo circular, común en el Cercano Oriente Antiguo, en que se enuncia un tema de una forma genérica y se lo retoma una, dos, tres veces, añadiendo siempre algo. Este procedimiento sirve para aclarar, poco a poco, las ideas, profundizarlas y hacerlas más fácilmente accesibles.
El primer capítulo (Samadhi pada) contiene la esencia de todo el sistema, que será desarrollado y expuesto en los tres capítulos siguientes. Por lo tanto, el capítulo primero ha sido escrito con la intención de ser comprendido por personas de un alto desarrollo intelectual y espiritual. Quienes tengan esas cualidades pueden lograr el conocimiento discriminativo y la liberación del sufrimiento con el entendimiento y abstracción de los primeros 33 aforismos (Gardini menciona 51).
Está dedicado a la "concentración" (samadhi), sus distintas formas, los obstáculos, las etapas graduales a través de las cuales se llega a la cesación de todos los procesos mentales que es el fin último del Yoga. Trata sobre los estados superiores de la conciencia y enuncia el principio de todos los yogas, describiendo diferentes estadios de las prácticas meditativas.
El segundo capítulo (Sadhana pada) expone las etapas de la práctica conocidas como “Asthanga Yoga” o sendero óctuple del Yoga, contiene textos de entendimiento más accesible, destinado a personas comunes. Describe con suficiente claridad al “Kriya Yoga” o Yoga de la acción, caracterizado por la práctica de la austeridad, el estudio y la devoción a Dios. Contiene las primeras cinco ramas del Yoga, “Yama”, y “Niyama” de corte ético moral y las tres psicofísicas, “Asana”, “Pranayama” y “Pratyahara”. Cada rama es preparatoria de la siguiente así como lo es cada grupo. Las ramas ético morales no confieren por sí mismas las perfecciones del Yoga pero son indispensables como umbral introductorio. El segundo grupo fortalece el cuerpo y prepara a la mente para la práctica de las tres últimas ramas, específicamente mentales, con las que se inicia el tercer capítulo.
Este capítulo titulado "la práctica" (sadhana) se refiere a los medios que se deben utilizar para lograr el control de la mente. Se necesita ver con claridad, otra vez, los impedimentos y sus causas. El hombre queda envuelto en el dolor, enredado en el ciclo de los nacimientos. Es posible salir a través de una opción fundamental que oriente decididamente hacia la "otra" orilla y ponga al practicante en la escalera de ocho peldaños que lleva a la meta.
Compuesto por 56 sutras, va dando diferentes pasos para la purificación de la mente. Da los diferentes medios para llegar a la meta, hablando de los ocho pasos del yoga. No es muy claro si el
asthanga yoga es la contribución de Patánjali o si él mismo las recopiló. Pero sí presenta todo el conocimiento del tema hasta ese momento.
El tercer capítulo (Vibhuti pada) trata las perfecciones o “Siddhis”, que no pueden ser obtenidas sin la maestría de la concentración, representada por “Dharana”, “Dhyana ”y “Samadhi”, cuya dinámica, en su conjunto, forman el “Samyama”.
Se estudian en este capítulo esas tres últimas etapas del proceso yóguico y los efectos extraordinarios que experimenta quien ha llegado a la concentración perfecta.
Compuesto por 55 sutras, se refiere al proceso de absorción.
La llave de las perfecciones supranormales es precisamente el “Samyama”. Por los “Siddhis” se llega a la comprensión trascendental y a la liberación.
Una alternativa singular es la intensa devoción a Dios, que en la práctica es expresada por la concentración mental aplicada exclusivamente a Dios y sus cualidades, conocido como Ekatativa”, que abre también las puertas de “Moksa” o liberación individual.
El cuarto capítulo (Kaivalya pada) perfila notablemente los aspectos causales de carácter espacio temporal, la relación que el individuo guarda con ellos y la manera de desprenderse de semejante relación que causa únicamente dolor.
La independencia o aislamiento (kaivalya), compuesto por 34 sutras, es la teoría de la transformación de la mente y se describe el estado absoluto de la mente.
Se refiere a la independencia o aislamiento (kaivalya), es la última parte y  la más filosófica y sutilmente polémica, en la que se tratan también dos cuestiones fundamentales de la metafísica: el tiempo y la naturaleza del conocimiento.

Enunciados de los Yogasutras y Aclaraciones por Capítulo

PARTE PRIMERA: LA CONCENTRACIÓN DE LA MENTE (SAMADHI)

Introducción
1. Ahora (empieza) la enseñanza del Yoga.
2. El Yoga es la supresión de las modificaciones de la mente.
3. Entonces el Vidente permanece en su propia naturaleza.
4. En los otros casos hay identificación con las modificaciones.
Las modificaciones mentales
5. Las modificaciones, perturbadoras y no perturbadoras, son cinco:
6. Recto conocimiento, error, imagen fantástica, sueño profundo y memoria.
7. Los elementos del recto conocimiento son la percepción directa, la inferencia y el testimonio.
8. El error es un conocimiento falso que no se fundamenta sobre la forma real del objeto.
9. La imagen fantástica es una acción de palabras, vacía de objetividad.
10. El sueño profundo es una modificación de la mente basada sobre la ausencia de contenido.
11. La memoria consiste en no dejar que desaparezca un objeto experimentado.
El ejercicio y el desapego
12. La supresión (se consigue) mediante el ejercicio y el desapego.
13. De estos dos, el ejercicio es el esfuerzo por la estabilidad (de la mente).
14. Sin embargo, éste se torna firme cuando se cultiva durante largo tiempo, sin interrupción y con seriedad.
15. El desapego es la conciencia de auto-control que tiene quien ha eliminado el deseo de objetos vistos y oídos.
16. Su forma suprema (se da) cuando, en virtud del discernimiento del espíritu, se logra la cesación del mínimo deseo respecto de los elementos constitutivos (de la materia).
Distintos grados de concentración
17. La (concentración) consciente es acompañada por argumentación, meditación, sensación de felicidad y sentido del yo.
18. La otra es aquella en que queda sólo una impresión latente y va precedida por el ejercicio que provoca la cesación (de los procesos mentales).
Diversas formas para llegar a la concentración
19. Para los seres incorpóreos y los que son absorbidos en la materia primordial es natural.
20. En los otros está precedida por la fe, la energía, la memoria y el conocimiento intuitivo que prepara para la concentración perfecta.
21. Está muy cercana para aquellos de intenso fervor.
22. Otra diferencia surge en razón del carácter suave, moderado o intenso (de los medios empleados).
Naturaleza y función del Señor
23. Puede conseguirse también por la entrega al Señor.
24. El Señor es un ser especial no afectado por las perturbaciones penosas, ni por el fruto de las acciones, ni por la acumulación de las impresiones latentes.
25. En él está presente, en el máximo grado, la posibilidad de la omnisciencia.
26. El es el maestro también de los primeros seres, pues no está limitado por el tiempo.
El mantra OM
27. El símbolo que lo expresa es la palabra sagrada (OM).
28. (Se necesita) su repetición continua y la meditación sobre su significado.
29. De tal manera (se logra) la adquisición de una conciencia vuelta hacia adentro y la eliminación de los obstáculos.
Obstáculos y consecuencias negativas
30. Enfermedad, apatía, indecisión, negligencia, indolencia, apego a los objetos de los sentidos, ilusión, incapacidad para la concentración, inestabilidad son los obstáculos que determinan la dispersión de la mente.
31. Acompañan a esta dispersión el sufrimiento, el malestar mental, el temblor del cuerpo y la respiración (difícil).
Medios para lograr la estabilidad de la mente
32. Para eliminar los obstáculos (se necesita) el ejercicio sobre una sola entidad.
33. Se alcanza la serenidad de la mente practicando la benevolencia hacia quien es feliz, la compasión por los que sufren, la alegría con los virtuosos y la indiferencia frente a los viciosos.
34. 0 bien mediante la expulsión y la retención del aliento.
35. También un proceso mental continuado ligado a un objeto de los sentidos) determina la estabilidad.
36. 0 bien con vivencias serenas y luminosas.
37. O bien la mente se concentra sobre los liberados de la pasión.
38. 0 toma como soporte el conocimiento propio del sueño o del sueño profundo.
39. 0 con la meditación en lo que uno desea.
40. Su poder se extiende del átomo más pequeño a lo infinitamente grande.
La identificación y sus estados
41. Cuando las modificaciones mentales han sido detenidas (la mente), como un cristal translúcido, logra la plena identificación con el sujeto cognoscente, con el acto de percepción o con el objeto y toma el color de lo que contempla.
42. El estado de identificación argumentativo se encuentra mezclado con los conocimientos ficticios (causados) por la palabra, el objeto y la idea.
43. El no argumentativo (se realiza) después de la purificación de la memoria, cuando la mente está corno vacía de su forma y sólo resplandece (en ella) el conocimiento del objeto.
44. Con esto quedan explicados también los estados meditativo y no meditativo relacionados con los objetos sutiles.
45. La esfera de acción de lo sutil tiene como límite lo indisoluble.
46. Estos (estados) constituyen la concentración con semilla.
Efectos de la identificación no meditativa
47. En la pureza del (estado de identificación) no meditativa (se da) la quietud espiritual.
48. Allí (se realiza) el conocimiento intuitivo aportador de verdad.
49. Su objeto difiere  (del objeto) del conocimiento que proviene de lo escuchado o de la inferencia, en cuanto se refiere a entidades particulares.
50. La impresión latente producida por él impide las otras.
Concentración sin semillas
51. Cuando también ésta queda detenida, en razón de la cesación de todo, surge la concentración sin semillas.

Aclaraciones a la Parte Primera
La mente
Por mente (chiita) se entiende la conciencia o psique con sus tres elementos:
–-Sensaciones (que reciben la influencia de todo lo que está fuera).
–-Inteligencia (que elabora lo que fue transmitido).
–-Auto-conciencia (o el sentido de la propia individualidad, con sus tendencias incomunicables).
Esta naturaleza cognoscitiva individualizada permite al hombre vivir, conocer, evolucionar o, también, alienarse.
La conciencia se caracteriza por continuos procesos mentales o modificaciones (vritti) porque la mente toma la forma del objeto que percibe modificándose ("como las olas que en sus agitados movimientos perturban la superficie del lago y esconden la visión de lo que yace en el fondo"). Debido a los estímulos de los sentidos, la mente se encuentra en un continuo estado de excitación que distrae y confunde. Se vuelca hacia las realidades materiales que más impresionan y más son accesibles y se identifica con ellas: el cuerpo, las riquezas, los honores, el poder. Absolutisa lo que es relativo y se cosifica. Ya que todos estos bienes son pasajeros y no pueden ofrecer ninguna garantía de seguridad, se vuelve inestable, mariposeando de un lado al otro.
Hay una pérdida de identidad del Yo, el olvido del Ser, la huida del centro a la periferia.
Causa de estos trastornos, raíz de todos los errores, es la mente. Es ella que introduce los objetos exteriores y los valora. Ella prepara las imágenes con que tiene al Espíritu cautivo y lo ofusca.
La fuente luminosa, yacente en en el fondo del lago, se vuelve invisible con motivo de las olas que agitan la superficie: se fragmente y se confunde con ellas. Los procesos mentales impiden la manifestación del Espíritu y lo disfrazan con realidades infinitas, ilusorias y engañosas.
Es un equívoco funesto que determina una progresiva involución y alineación. De la misma manera que un animal atado a un árbol puede moverse sólo según el largo de la cuerda o cadena que lo tiene preso, así el hombre puede actuar con mayor o menor libertad según los estados psíquicos producidos por la actividad mental.
Hay que romper esa espiral y esas ataduras y el punto neurálgico es otra vez, la mente.
La mente esclaviza pero puede también liberar. Cambiando los procesos mentales se cambia al hombre. Las imágenes mentales deben volverse progresivamente más sutiles, tranquilas y transparentes para que puedan re‡flejar la Realidad última, el Espíritu, y transformarse en ella.
Las técnicas del Yoga tienden a esto.
Cuando no existan más imágenes dispersivas, en el perfecto control de la mente, en la concentración total, el Espíritu se asomará en todo su esplendor haciéndose autotransparente. Permanecerá en su propia naturaleza, libre de ignorancia, el dolor y todas las limitaciones del tiempo y del espacio.
Esta recuperación del Ser es el fín último que el Yoga persigue. Es el comienzo de una nueva vida.
Mérito de Patánjali es haberlo presentado desde el comienzo. Los ideales mueven al hombre y los sacrificios se afrontan con coraje, serenidad y facilidad en la medida en que un móvil adecuado ocupa y atrapa la conciencia. Mirando la cima de la montaña el alpinista arriesga su vida.
La ardua técnica de desprendimiento que los aforismos presentan no se justifica por sí misma; sólo apunta a la liberación del Yo de los desequilibrios de la existencia inauténtica.
¿Qué es el Yoga? 
"El yoga es la supresión de las modificaciones de la mente.
Entonces el Vidente permanece en su propia naturaleza.
En los otros casos hay identificación con las modificaciones".
"Yoga: CITTA VRITTIS NIRODHAH"
Si se comprende este significado se comprende el yoga. Todo lo demás son explicaciones de esto.
CITTA: Mente
VRITTIS: Modificaciones que trabajan en la mente.
NIRODHAH: Control, Cesación.
"Control o cesación de los movimientos que trabajan en la mente".
Otras interpretaciones similares: "Restricción de actividad mental", "Controlar los variantes patrones de la consciencia", "mente libre de disturbios".
A menudo el Yoga de Patánjali se define empleando el segundo aforismo: "supresión de las modificaciones de la mente" (chitta vritti nirodhab). Pero esta es sólo la parte negativa. Habría que añadir su verdadera finalidad que es: "el permanecer en la propia naturaleza" (svarupa).
El Yoga fue definido por el Bhagavad Gita como "la habilidad en la acción" y "el equilibrio de la mente". Patánjali se acerca más a esta última definición y expresa claramente su postura en los comienzos de los Aforismos.
Katha Upanishad, II,6,II: "El Yoga es el firme control de los sentidos. El hombre, entonces, no es más víctima de inquietudes. El Yoga pues, es el comienzo (de una vida nueva) y el fin de todas las perturbaciones)".
Principios de la Práctica. Abhyasa: Práctica para propósitos específicos.
Patánjali habla en los aforismos de las características de la práctica:
Durante largo tiempo y con una fuerte motivación.
Cuando hacemos las prácticas, los resultados van a estar allí.
El principio básico es la regularidad de las mismas.
No importa cuanto tiempo, sino la continuidad del estímulo.
Uno no come solo los fines de semana, sino todos los días, esa es la necesidad del cuerpo. Sino el efecto no puede ser acumulativo.
Esto no es bien entendido en occidente donde queremos todo nuevo. Cambiando continuamente no logramos nada. Hay que ajustarse a una práctica para obtener resultados. Y cuando se los obtiene uno se satisface. Este es el mensaje de los Yoga Sutra.
Continuidad con una fuerte motivación y por un largo período si queremos realmente ver los resultados.

PARTE SEGUNDA: LA PRÁCTICA (SADHANA)

Yoga preliminar de la acción
1. Austeridad, estudio y entrega al Señor constituyen el Yoga de la acción.
2. Este se practica para atenuar los impedimentos y realizar la concentración perfecta.
Los impedimentos
3. Los cinco impedimentos son: la ignorancia, el egoísmo, la pasión, la aversión y la voluntad de vivir.
4. La ignorancia es la fuente de todos los demás, sean ellos latentes, atenuados, intermitentes o en plena actividad.
5. La ignorancia es considerar eterno lo que es efímero, puro lo impuro, feliz lo doloroso y ver al Yo en el no yo.
6. El egoísmo es la identificación del poder de ver (Espíritu) con el acto de ver (sentidos).
7. La pasión se fundamenta en el placer.
8. La aversión se basa en el dolor.
9. La voluntad de vivir, sustentada por su propia fuerza interior, domina también en el sabio.
10. Estos (impedimentos), cuando son sutiles, desaparecen por medio de la disolución.
11. Sus manifestaciones activas se suprimen con la meditación.
La trasmigración y sus efectos
12. El depósito de todas las acciones tiene su raíz en los impedimentos y causa nuevas experiencias en la vida presente y futura.
13. Mientras esta raíz exista, ella determinará la clase social, la duración de la vida y otras experiencias.
14. Todo esto tiene como fruto alegría y dolor, como consecuencia de la virtud y del vicio.
El dolor universal y sus causas
15. Para aquel que aprendió a discernir, todo es sólo dolor a causa del sufrimiento producido por los cambios continuos, la angustia, los nuevos anhelos y también por la contraposición entre las actividades de los elementos constitutivos de la naturaleza.
16. Se puede y se debe evitar el dolor futuro.
17. La causa de lo que se debe evitar es la unión entre el Vidente y lo visible.
La materia, el Espíritu y sus evoluciones
18. Lo visible está compuesto de los elementos y los sentidos; su esencia es la luminosidad, la actividad y la inercia y su fin la experiencia y la liberación.
19. Las subdivisiones de los elementos constitutivos son: los diferenciados y los indiferenciados, el mero disoluble y el indisoluble.
20. El Vidente es sólo conciencia; aunque puro, conoce a través de las  de las modificaciones de la mente.
21. La razón de ser de lo visible es sólo la de servir a Él.
22. Y continúa existiendo aunque haya desaparecido para quien ha alcanzado su objetivo, puesto que es común a otros (Espíritus).
23. La unión de la materia y del Espíritu determina la percepción de sus respectivas naturalezas y del poder de ambos.
24. La ignorancia es la causa de esta (unión).
Lucidez de discernimiento e independencia
25. De su inexistencia resulta la desaparición de la unión. Este abandono lleva a la suprema independencia del Vidente.
26. El medio para el abandono es la ininterrumpida lucidez del discernimiento.
27. El conocimiento intuitivo (se desarrolla) a través de siete etapas.
28. Cuando, mediante el ejercicio de los grados del Yoga, la impureza queda eliminada, surge el conocimiento intuitivo hasta llegar a la imperturbada lucidez del discernimiento.
Los ocho grados
29. Los grados son ocho: prohibiciones, reglas, posturas, control de la respiración, retracción de los sentidos, atención fija, meditación y concentración.
30. Las prohibiciones son: no dañar, veracidad, no robar, continencia, no poseer.
31. Cuando no (están) limitadas por clase social, lugar, tiempo y circunstancias se extienden a todos los casos posibles, constituyen el gran voto.
32. Las reglas son: limpieza, serenidad, disciplina, estudio, entrega a Dios.
33. Para vencer las inclinaciones negativas hay que meditar en los ideales contrarios.
33. Las inclinaciones negativas son: violencia, mentira, robo, incontinencia, codicia. Pueden ser realizadas por acción directa, por una orden o por aprobación. Precedidas por la avidez, la ira, y el ofuscamiento pueden estar presentes en grado leve, mediano o intenso. Sus frutos son: infelicidad e ignorancia interminables. Por eso hay que aplicarse con la meditación en sentido contrario.
Abstinencias
35. Quien está firmemente establecido en el no dañar, aleja de su presencia toda enemistad.
36. Quien está firmemente establecido en la veracidad, asegura a sus palabras un resultado infalible.
37. Quien está firmemente establecido en el no robar, tiene todos los tesoros a su alcance.
38. Quien está firmemente establecido en la continencia, obtiene energía.
39. Quien está firmemente establecido en el no poseer, despierta al cómo y al porqué de la vida.
Reglas
40. Por medio de la limpieza se logra indiferencia hacia la vida corporal y discreción en las relaciones con los demás.
41. De la pureza mental derivan: luminosidad del intelecto, alegría de ánimo, concentración, control de los sentidos, y capacidad para contemplar el Yo.
42. De la serenidad deriva una felicidad inigualable.
33. De la austeridad, la destrucción de las impurezas, la perfección del cuerpo y de los sentidos.
44. Del estudio, la unión con la divinidad personal.
45. De la entrega al Señor, la perfección de la concentración.
Postura
46. La postura debe ser estable y cómoda.
47. Mediante una relajación del esfuerzo y la contemplación del infinito.
48. De ahí la cesación absoluta de la perturbación de los pares de opuestos.
Control de la respiración
49. Logrado esto (sigue) el control de la respiración que tiende a la suspensión de los movimientos de inhalación y de exhalación.
50. La respiración, según sus modificaciones, es externa, interna o puede ser prolongada y sutil.
51. El cuarto grado consiste en la superación de la esfera de lo externo y lo interno.
52. Así queda rasgado el velo que cubre la luz.
53. Y aparece la capacidad de la mente para la concentración.
Retracción de los sentidos
54. Cuando los sentidos se apartan de sus objetos y casi asumen la forma propia de la mente, se logra la retracción.
55. Y el dominio absoluto de los órganos sensorios.

Aclaraciones a la Parte Segunda
El dolor universal y sus causas
Punto de partida del Yoga es la constatación del sufrimiento que reina en el hombre y en el mundo.
"Para aquel que aprendió a discernir, todo es sólo dolor a causa del sufrimiento producido por los cambios continuos, la angustia, los nuevos anhelos y también por la contraposición entre las actividades de los elementos constitutivos de la naturaleza" (YSP II,15).
El dato fundamental para todo ser humano es el dolor en sus manifestaciones internas y externas, físicas, morales y espirituales.
El aforismo presenta las causas remotas de donde proviene el dolor, y nos da una acabada descripción fenomenológica del estado conflictivo de la condición humana.
El hombre, ser temporal.
El dolor es, en primer lugar, consecuencia de cambios constantes.
El hombre es un ser temporal. Vive en el tiempo sujeto a un antes y un después. En realidad, lo que existe es sólo el presente: el pasado es un recuerdo y el porvenir una esperanza. Sólo en un punto la rueda están en contacto con la tierra.
En su constante correr, el instante presente se auto destruye y destruye todo lo que encuentra.
El tiempo hace que los seres existan pero, contemporáneamente, los lleva a la aniquilación. "Siendo dejamos de ser; estando nos vamos" (H.Armani). Vivir en el tiempo es estar en la mutación. El cambio es tan rápido, el hombre común está tan hundido e identificado con él, que piensa vivir eternamente y estar como sobre una tierra no sujeta a ningún movimiento. En tal sentido planea y construye su vida pero nada de lo que toca y ve es estable. Como un río, nadie puede detener ese uír constante. Todo se transforma en pasado, en algo irreparable, irreversible, mientras el futuro está delante del hombre, imprevisible, con sus interrogantes indescifrables.
El tiempo envenena y contamina todo lo que toca. Nadie puede quedarse en la juventud, la edad madura, la salud, la felicidad o en cualquier otro bien. Lo que existe es solo el presente. Todo se transforma en pasado, en algo irreparable, irreversible.
El hombre, ser angustiado
En la medida en que el hombre toma conciencia de su temporalidad (y sólo él lo puede hacer, a diferencia de los animales que sólo viven en el tiempo cósmico), se transforma en un ser angustiado. Experimenta que "no hace pie"; es una ‡flor que se marchita muy rápidamente. Siente que a nada puede aferrarse porque todo se encuentra en su misma situación. Abriendo sus ojos se ve como suspendido en el vacío, sin ningún punto de apoyo: el terreno falta bajo sus pies, los ideales más queridos se desvanecen. Todo aparece como un sueño, fantasmas que se pierden en la nada. La insatisfacción del hombre es la impermanencia del mundo que se acaba como un puro sueño.
Seres queridos, honores, dinero, placeres, pueden ofrecer instantes de felicidad, pero todo está sujeto al cambio y a la inseguridad. La fama se transforma rápidamente en humo; el dinero determina a menudo dependencias alienantes, los placeres pasan rápido; los amigos pueden traicionar, la potencia es inestable.
Aunque todo parezca estar bien, sin dificultades, la muerte está siempre al acecho. Patánjali habla de la muerte como de una realidad que debe ser concientizada. Reconoce, sin embargo, que esto no es fácil pues puede inspirar temor también en los sabios. La muerte, en realidad, se presenta como algo absurdo y misterioso. Es el límite absoluto, el más grande desafío lanzado al espíritu humano y a la vida.
Soberana de todo lo que existe, prueba, de la manera más inobjetable, que los valores terrenables sobre los cuales los hombres quieren fundamentar su vida son inestables. Tarde o temprano todos deben hacer esta experiencia. La muerte arrastra todas las ilusiones: es la imposibilidad de las posibilidades. Esta es la razón más honda, generalmente inconsciente, de la angustia del hombre.
El hombre, ser ansioso
La angustia está acompañada por los "nuevos anhelos". El hombre es un ser anhelante. Se ve limitado pero no coincide con sus límites, sean éstos materiales o espirituales. Se experimenta inacabado y proyectado continuamente fuera de sí mismo hacia algo que nunca puede lograr. Jamás puede tener la totalidad en el presente.
En todos los ámbitos existe una desproporción insalvable entre lo que el hombre desea y los resultados de sus acciones.
Anhela la verdad, pero cuanto más conoce, más ignorante se siente. La sombra del misterio individual y cósmico se agranda.
Anhela la bondad, pero (aparte de las dificultades que puede encontrar para acercarse a ella) sus logros son siempre limitados e imperfectos. Los santos se experimentan pecadores. Quién más se acerca a la luz, más ve las manchas, más advierte el contraste entre el bien perseguido y las realizaciones diarias.
Busca la belleza, pero el mundo de lo sensible es incapaz de reflejar adecuadamente el resplandor del infinito. Los grandes artistas buscando la belleza en sus creaciones, más experimentaban el alejarse de sus obras del ideal que ellos perseguían. Leonardo al morir, deja inacabada en su habitación, la Gioconda. Es la rendición frente a lo inexplicable.
Esto prueba , por un lado, la finitud de todo lo que le rodea y por el otro la exigencia hacia el absoluto que caracteriza al ser humano. Nada de lo que puede hacer o poseer calma su sed y su hambre. Jamás puede detenerse satisfecho, siempre algo lo empuja hacia adelante, hacia la totalidad. Esta es su grandeza y su miseria, la causa de su continua insatisfacción y de sus siempre "nuevos anhelos".
Los conflictos internos del hombre
En su misma esencia el hombre es un ser conflictuado. La parte psico-física de que se compone está constituida de tres elementos en lucha constante: el luminoso o inteligente, el activo y el pasivo
(YGS II, 18). Son las gunas o cuerdas que tejen la materia. Cada ser recibe un condicionamiento determinado por uno u otro de estos elementos.
De ahí las tensiones entre el bien y el mal, el espíritu y la materia, entre lo que uno desea hacer y las presiones de la sociedad. Hay que elegir entre fuerzas opuestas, pero aún las elecciones mejores que favorecen nuestra realización comportan límites y renuncias.
Cada elección es siempre imperfecta, condicionada por los límites personales o del ambiente.
Por otro lado, nadie puede rehusarse a tomar partido; el no elegir ya es en sí una decisión, la peor de todas. De estas antinomias de la libertad nacen las contraposiciones, internas y externas, que conmueven al ser humano.
El hombre intenta quebrantar su soledad y busca en la comunión con otros, un medio para salir de su angustia. La familia, las comunidades, ofrecen un cierto alivio, pero los problemas fundamentales quedan inmutables. En la comunidad se proyectan, agrandados, los conflictos individuales (todos están en camino hacia la muerte, insatisfechos y angustiados), ambiciones, celos, odio, lucha por el poder (Ver el Bhagavad Gita).
La actitud del sabio. 
El Yoga invita a tomar conciencia de una manera adulta y responsable de esta realidad tan común como desconcertante.
Frente al dolor son posibles actitudes equivocadas e infantiles.
Algunos prefieren aturdirse. Son como un enfermo que no quiere mirar sus males y evita el diagnóstico. Se aferran al rayo de luz, a instantes de tiempo y lo eternizan. Tienen miedo de pensar que todo tendrá un fin y se engañan, buscando paliativos en la acción, lo exterior, el consumismo.
Se dejan vivir, arrastrados como objetos, por el tiempo cósmico que ellos no concientizan.
Cuando llega el momento de la rendición de cuentas (y nadie puede escapar) esas mismas personas toman otra postura equivocada: la rebelión. Se hunden aplastados bajo un peso para ellos excesivo e imprevisto. Entonces protestan, quieren imponer sus leyes de vida y no aceptar las que han sido establecidas, que son inmanentes al ser. Otros se resignan, aceptan el dolor como una fatalidad que no pueden eludir. Siguen adelante, paciente y resignados (como un burro, bajo los golpes del destino adverso). Esto no es todavía una postura adulta.
El Yoga aboga por una conciencia alertada y una visión realista: aprender a enfrentar con sabiduría al dolor, hacerse instruir por él, sacar provecho de las lecciones que nos puede dar.
"Es nuestra inevitable toma de contacto con la realidad, con la finitud del ser humano, lo que nos permite (como una luz) conocer y aclarar el misterio de la vida" (Unamuno).
"La grandeza del hombre está en que se conoce a sí mismo como miserable".
"Apetecemos la verdad y no hallamos en nosotros más que incertidumbre. Buscamos la felicidad y no encontramos más que miseria y muerte. Sin embargo somos incapaces de no apetecer la verdad y la felicidad. Este deseo se nos ha dejado tanto para castigarnos como para hacernos sentir dónde hemos caído"(Pascal).
Existe una cuota de dolor que todos deben pagar, directa consecuencia de sus errores y de su conducta equivocada. Este condicionamiento no debe ser interpretado de una manera fatalista. El hombre no pierde su libertad y tiene posibilidad de evitar todo lo que podría empeorar su situación presente y de poner las premisas de un porvenir mejor.
Nadie que diga: "no puedo".
La perspectiva es pues, positiva. En el contexto general de los Aforismos, el dolor no es el fin de la experiencia humana, es sólo un punto de partida. Aunque sea una necesidad cósmica, resultado de los elementos constitutivos del ser humano.
Patánjali es muy explícito: "se puede y se debe evitar el dolor futuro" (YGS II, 16).
Cada uno tiene que comprometerse a construir un porvenir más feliz y romper el cerco que lo rodea.
"Aún aquellos que han nacido en un ambiente de pecado, las mujeres, los comerciantes y los intocables también, todos ellos alcanzan la meta suprema" (Gita 9,32).
Teoría de los Klesas (impedimentos). 
Es un análisis vivencial de la causa básica y fundamental de la miseria, el dolor, la a‡flicción del hombre y la forma efectiva de erradicarla.
Literalmente, klesas significa mancha, perturbación penosa o impedimento. Los klesas son las causas de las modificaciones  que trabajan en la mente (Citta Vriti) creadoras del dolor. Se trata de tendencias que actúan en el interior de cada ser humano ocultando al Espíritu, al verdadero ser, y contribuyen a atar la existencia a lo ilusorio y efímero.
Patánjali afirma que los Klesas (impedimentos para la liberación) son: avidya (conocimiento empírico, desconocimiento de la esencia); asmita (egoicidad); raga (el apego); dvesa (la aversión, odio, antipatía) y abhinivesa (voluntad de vivir).
Avidya (desconocimiento de la esencia, ignorancia) es la fuente de los demás impedimientos, que pueden estar en condición latente o adormecida, atenuada, intermitente o continua.
Estos elementos negativos que agravan la situación conflictiva de la existencia humana son cinco y pueden estar en estado:
Latente: es el estado de máximo debilitamiento de los klesas que logran alcanzar los grandes yoguis y santos. Desde el punto de vista práctico están inactivos, tanto como si fueran inexistentes.
Atenuado o adormecido: es un estado de gran debilitamiento de los klesas, que si bien están presentes, su funcionamiento poco frecuente se ve debilitado. Es el grado de reducción que, por lo menos, logran alcanzar los practicantes del camino del yoga de los ocho miembros (asthanga yoga). El mejor camino para alcanzar este estado de debilitamiento de los klesas es mediante los procesos de puri…ficación (kriyayoga), puesto que como a…firma Patánjali, el kriyayoga se practica para debilitar los impedimentos y facilitar el samadhi.
Intermitente: es la condición en que se encuentran los klesas en el hombre común que posee un adecuado auto-control. Los cuatro últimos klesas, normalmente adormecidos, sólo pueden llegar a activarse ante circunstancias especiales que lo requieran (funcionamiento intermitente).
Activa permanente: es la condición en que se encuentran los klesas en aquellas personas que no pueden auto-controlarse. Ante el menor estímulo reaccionan pudiendo herir a quienes los rodean, por lo que se constituyen en peligrosos para la sociedad. En estos casos, sus emociones, o sea la reacción frente al estímulo necesita ser refrenada, lo cual sin dudas se logra a través de la práctica del kriyayoga.
Algunos autores dicen que avidya no se incluye en esta gradación ya que se trata del klesa fundamental y, por lo tanto, está presente y activo en cierta forma en la vida de todos y, aunque mínimamente presente, causa problemas. El verdadero objetivo del yoga es eliminar avidya completamente. Esto se torna posible sólo cuando se logra la perfección en yoga y se alcanza su objetivo final (la liberación).
No existe posibilidad de extinción de los klesas en esta vida, ya que hasta el yogui más elevado espiritualmente necesita de ellos para vivir en este mundo para seguir impartiendo su sabiduría.
Los klesas constituyen la causa básica y fundamental de la aflicción y miseria humanas. El único medio para liberarse de los klesas es la práctica sistemática e ininterrumpida de la disciplina yóguica ya que el conocimiento teórico no es suficiente.
Avidya (ignorancia, desconocimiento de la esencia). 
Es ver permanencia, pureza, felicidad y Ser en lo impermanente, lo impuro, lo doloroso y el no Ser, respectivamente.
Traducirla por ignorancia, presta a confusión.
Es la causa de tomar los valores transitorios de la existencia como fuente de felicidad permanente.
El desconocimiento de nuestra verdadera naturaleza da como resultado la incapacidad para distinguir entre el ser eterno, puro, feliz y el no-ser …finito, impuro, afligido. De esta manera, nos impide transitar hacia nuestro verdadero Yo. Tomamos a la realidad transitoria como real. Así es como cae sobre nosotros un velo ilusorio que nos hace tomar el no-ser por el Ser, impidiéndonos distinguir lo finito de lo in…finito.
Avidya nos convierte en prisioneros de nuestros sentidos y de nuestra razón no siendo capaces de vislumbrar nuestra propia esencia ni el fundamento último de la realidad.
Avidya sirve como fuente para los otros cuatro klesas que podría decirse son, en cierta manera, aspectos especiales de avidya presentes en nuestra vida diaria en distintos grados de intensidad.
En distintas circunstancias, avidya adopta diferentes formas . Con solo suprimir avidya, los otros klesas desaparecerían.
Avidya como klesa, persiste en cada uno mientras transcurre la existencia humana. Produce puntos de vista equivocados tanto en el hombre común como en el sabio, que en un momento u otro se ve bajo la influencia de avidya, sin excepción.
Aún cuando todos los hombres sepan que los objetos mundanos son cambiantes y finitos, se piensa y actúa como si fueran estables y permanentes. Hasta los objetos impuros, aquellos que no aumentan nuestra paz mental, son vistos y tratados como si fueran puros y, por lo tanto deseables.
Un último análisis lleva a Patánjali a expresar que todo es miseria y dolor (para las personas discriminativas) ya que los hombres siempre buscan y corren tras los objetos y fenómenos efímeros, viéndolos equivocadamente, como fuentes de felicidad. O sea que los objetos, cosas y eventos mundanos que no sirven para el propósito de desarrollar una conciencia interior más elevada y alcanzar el verdadero Ser, se las ve como medios para alcanzar el objetivo último en la búsqueda del Ser.
Asmita (egoicidad). 
Se refiere a la identificación de la conciencia con el vehículo por cuyo medio se está expresando. Comprende dos procesos simultáneos: la pérdida del conocimiento de sí mismo y la identificación del Ser o espíritu con sus vehículos. El "yo soy", se convierte en "yo soy esto" en el momento en que el ser se involucra con la materia, el velo de avidya cae sobre la conciencia, ésta se identifica con sus vehículos, deja de ser pura y el velo se va engrosando en un proceso de involución.
Se equivoca el verdadero ser, con ser meramente un cuerpo. Un objeto del mundo manifiesto toma el lugar del Sujeto o veedor y esta identificación  falsa conduce al dolor y la miseria.
Es la realización concreta de la ignorancia en nuestra vida diaria, en tomar como verdadera la conciencia del yo temporal finita en lugar de la conciencia eterna in…finita.
La egoicidad o conciencia del yo hace que consideremos el yo fenoménico, base de toda experiencia sensitiva, como fundamento y esencia del Ser transformándolo en origen, …fin y medida de la vida.
Raga (apego). 
El apego, raga, es la atracción que sigue al placer.
El placer se transforma en el factor determinante de las acciones, causando ansiedad y desequilibrio psíquico, perdiendo contacto con su verdadero Ser y oscilando entre los pares de opuestos (amor-odio, atracción-repulsión) estando condicionado por in…finitas circunstancias sin disfrutar de una verdadera libertad.
Dvesa (aversión). 
Aversión se basa, en cambio, en el dolor (dukka). Constituye junto con raga un par de opuestos que condicionan nuestras vidas y nos atan a niveles inferiores de conciencia.
Abhinivesa (voluntad de vivir). 
Indica la voluntad de vivir, la fuerza vital que hace posible la vida. Domina hasta los más sabios ya que, desde la eternidad mueve la evolución del universo. Por su parte, la muerte es un hecho ineludible, una ley cósmica que actúa sobre todos los seres. Pero el impedimiento se constituye con el apego a la vida fundamentado en la atracción-repulsión y en tomar la realidad fenoménica como …n último por la ignorancia. Es el klesa que posee fuerza propia conduciendo en forma activa hasta al más sabio. "El apego a la vida (abhinivesa) es el miedo innato a la muerte que domina aún al sabio".
¿Por qué Yoga?
 Para aliviarse de las miserias de la vida.
¿Qué es lo que queremos en nuestra vida?. Felicidad. Todos queremos esto aunque no entendamos que es. La felicidad es la ausencia de pesares. Los modos de ser felices son diferentes, hay diferentes ideas de la felicidad y la buscamos a través de diferentes medios. Pero uno no llega al punto fundamental de la causa del sufrimiento. Los antiguos dividían en tres los orígenes de los
pesares (DUKKA: Dolor).
1: Pesares psicofísicos: Es el termino técnico para designar dolor, miedo.
2: Dolor producido desde afuera: Como por la picadura de insectos que pueden producir alergias, por ejemplo.
3: Calamidades: Sobre la que no tenemos control como inundaciones o terremotos.
La necesidad básica del ser humano es sobrellevar los diferentes tipos de dolor.
Quien pueda discriminar se dará cuenta que todo es dolor. A esta conclusión llegó Buda.
¿Seguimos en manos de Dukka?. El hombre trata de liberarse pero no sabe de donde viene el dolor.
Patanjali lo explica muy bien. Dice que las KLEYAS (KLESAS) (tendencias inherentes, obstáculos, impedimientos) son las culpables.
Dukka (dolor) no es más que la perturbación de Citta (la mente).
La felicidad está adentro, es una experiencia que no depende de lo externo. Por ello es importante que nos quitemos las penurias y para ello hay que hacer YOGA.
¿Por qué Yoga?. Para aliviarnos de las miserias de la vida.
Los klesas en su forma sutil, pueden no sólo refrenarse sino hasta quizás eliminarse totalmente por medio de un proceso de involución (la obtención de la liberación, objetivo final del ashtanga yoga de Patánjali).
La completa disolución de avidya es muy difícil y casi imposible, en esta vida mundana.
Mientras avidya esté activo y presente, los otros cuatro seguirán existiendo por ser avidya su origen y soporte, hasta podría decirse que son necesarios y esenciales para mantener una vida práctica. A través del kriyayoga puede reducirse su fuerza, debilitándolos. Otro método que propone Patánjali es dhyana, el ‡flujo continuo de la mente en el objeto de meditación. Al alcanzar el estado meditativo, los klesas gradualmente quedan reducidos hasta tal punto, que no interfieren en la vida cotidiana.

PARTE TERCERA: LOS PODERES (VIBHUTI)

Atención, meditación y concentración. 
1. La atención es la fijación de la mente en un solo punto.
2. La meditación es la atención constante en el objeto presente en la mente.
3. Ésta, cuando sólo hay conciencia del objeto contemplado como si la forma propia de la mente desapareciera, se transforma en la concentración.
La concentración perfecta. 
4. Las tres, tomadas juntas, constituyen la concentración perfecta.
5. De su conquista, el resplandor de la conciencia superior.
6. Su aplicación, por etapas.
7. Estas tres son internas respecto de las anteriores (etapas).
8. Sin embargo, externas con respecto a la concentración sin semilla.
Transformaciones de la mente. 
9. Cuando desaparecen las impresiones latentes (de la experiencia ordinaria) y surgen las de la cesación, la mente se transforma en ellas y así se produce la transformación en la cesación.
10. Su ‡fluir se hace uniforme debido a la impresión latente.
11. Cuando se elimina la dispersión y se produce la atención, se verifica la transformación de la concentración.
12. Además, cuando las impresiones reprimidas y las que surgen son iguales, se realiza aquella transformación de la mente llamada fijación en un punto.
Transformaciones en el cosmos. 
13. Con esto quedan explicadas las transformaciones de las formas constitutivas, las características temporales, y las diversas condiciones, en los elementos y en los sentidos (el mundo entero).
14. La sustancia es lo que resulta relacionado con las propiedades en reposo, en actividad o indefinibles.
15. La causa de la diversidad de las modificaciones de las formas es la diversidad de las consecuencias.
Los poderes paranormales. 
16. Por la concentración perfecta sobre las tres transformaciones (se logra), el conocimiento del pasado y del futuro.
17. Practicando la concentración perfecta sobre el sonido de la palabra, su significación y la idea correspondiente -tres aspectos que ordinariamente se mezclan en recíproca superposición- (se logra) el conocimiento de los sonidos emitidos por cualquier ser viviente.
18. Por la concentración perfecta sobre las impresiones latentes (surge) el conocimiento de las vidas anteriores.
19. Y (por la concentración) sobre los signos externos (se da) el conocimiento de los hábitos mentales de los otros.
20. Pero no el contenido por no haber sido el objeto (de la concentración).
21. Practicando la concentración perfecta sobre la forma del cuerpo, desaparece la perceptibilidad de ella, y al no existir ya un contacto directo con los ojos, el cuerpo se torna invisible.
22. Por el mismo proceso también los sonidos dejan de oírse.
23. La acción puede ser activa o latente. Por la práctica de la concentración sobre ella o por los signos premonitorios, se conoce el momento de la muerte. 
24. Practicando la concentración perfecta sobre la amistad y otros sentimientos, se logran los poderes (correspondientes).
25. Sobre los poderes (de animales), la fuerza del elefante y de otros.
26. Se logra el conocimiento de las cosas pequeñas, sutiles, escondidas y lejanas aplicando a ellas la luz interior.
27. De la concentración sobre el sol, el conocimiento de los espacios cósmicos.
28. Sobre la luna, la disposición de las estrellas.
29. Sobre la estrella polar. el conocimiento de los movimientos (de ellas).
30. Sobre el ombligo, el conocimiento de los movimientos del cuerpo.
31. Sobre la cavidad de la garganta, la cesación del hambre y de la sed.
32. Sobre el conducto llamado “de la tortuga, la estabilidad (firmeza).
33. Sobre la luz de la cabeza, la visión de los perfectos.
34. O, gracias a la intuición, (el conocimiento de) todo.
35. Practicando la concentración perfecta sobre el corazón, la percepción de la mente.
36. La experiencia humana comienza cuando se confunde al Espíritu con la luminosidad del intelecto aunque en realidad son totalmente distintos. Aplicando la concentración perfecta a lo que existe para su propio fin, surge el conocimiento del Espíritu.
37. De ahí nacen la intuición y el oído, el tacto, la vista, el gusto y el olfato (super-normales).
38. Estos son poderes eficaces en la experiencia ordinaria, impedimentos en la concentración.
39. La mente puede penetrar en un cuerpo ajeno cuando se debilita la causa de la atadura y se conocen sus movimientos.
40. Por medio del dominio del aliento vertical (se logra) no hundirse en el agua, las ciénagas, las espinas y el poder de la ascensión.
41. De la conquista del aliento regulador, un fuego brillante.
42. Practicando la concentración sobre la relación entre el éter y el oído, (se logra) un oído transfísico.
43. Practicando la concentración sobre la relación entre el cuerpo y el éter y fijando la mente en livianos copos de algodón se logra el desplazamiento por el espacio.
44. La modificación que se forma fuera del cuerpo de una manera no artificial, se llama el gran estado incorpóreo y destruye todos los velos que cubren la luz.
45. Por la concentración sobre la densidad, la naturaleza propia, la sutileza, la inmanencia y la finalidad de los objetos (se logra) el dominio de los elementos.
46. Sigue, entonces, la adquisición de los poderes físicos, como la capacidad de volverse pequeño, la perfección del cuerpo y la ausencia de impedimentos a sus funciones por los elementos constitutivos.
47. La perfección del cuerpo consiste en la belleza, la gracia, la fuerza y solidez diamantina.
48. Por la concentración sobre el poder de percepción, la naturaleza propia, la individualidad, la inmanencia y la finalidad, se logra el dominio de los sentidos.
49. Sigue la velocidad del pensamiento, la independencia de los sentidos y la conquista de la naturaleza primera.
Poderes e independencia. 
50. Sólo del puro discernimiento de la diferencia entre el Espíritu y la luminosidad del intelecto, surge la supremacía sobre todos los estados de la existencia y la omnisciencia
51. Por el desapego también de todo esto, quedan destruidas las semillas de las ataduras y sigue la independencia.
52. Hay que destruir el apego y el orgullo ante las tentaciones de parte de “seres superiores”, ya que se corre el riesgo de recaer en el mal.
53. De la concentración sobre el instante y la sucesión, procede el discernimiento y el conocimiento experimental.
54. De aquí resulta el conocimiento de la distinción entre dos cosas semejantes que no pueden ser diferenciadas por especie, característica y lugar.
55. La sabiduría discriminativa es liberadora y se extiende a todas las condiciones de una manera simultánea.
56. Cuando la luminosidad del intelecto y el Espíritu llegan a igual pureza, se da la independencia total.


PARTE CUARTA: LA INDEPENDENCIA (KAIVALYA)

Origen de los poderes. 
1. Los poderes provienen del nacimiento, del uso de hierbas, de fórmulas mágicas, del ascetismo y de la concentración.
Transformaciones y transmigración
2. La transformación de una forma a otra proviene del fluir de la naturaleza.
3. La causa accidental no es productora real de estas transformaciones, sino sólo destruye los obstáculos como en el caso de un campesino.
4. Las mentes creadas preceden solo del sentimiento de la individualidad.
5. Únicamente la mente natural mueve la actividad de las otras mentes.
6. Entre ellas, sólo la nacida de la meditación no acumula impresiones latentes.
Leyes internas del proceso de transmigración. 
7. Las acciones del yogui no son ni blancas ni negras: las de los demás son de tres especies.
8. De las impresiones subliminales producidas por éstas, se manifiestan sólo las que se encuentran en condiciones favorables.
9. La relación de las impresiones latentes con sus efectos no se interrumpe, no obstante las separaciones de clase, espacio y tiempo.
10. Estas son sin principio, siendo el deseo de vivir, eterno.
11. Y pueden cesar de existir si se destruye la conexión entre causa y efecto, sustrato y soporte que determina su mantenimiento.
El tiempo y sus fases.
12. El pasado y el futuro existen según su propia naturaleza (en el presente) aunque su actualización se realice en fases temporales distintas.
13. Estas son manifiestas o sutiles y tienen corno esencia a los elementos constitutivos de la materia.
14. La unicidad de los objetos se debe a la unidad de las transformaciones de los elementos constitutivos.
Origen de las ideas. 
15. Aunque los objetos sean iguales, son percibidos de distintas maneras porque las mentes son diferentes.
16. Los objetos no dependen de la percepción de la mente, pues ¿que pasaría con ellos cuando no fuesen conocidos por aquella mente?
17. Un objeto es conocido o no conocido, en la medida en que la mente esté teñida por él
18. Las modificaciones de la mente son siempre conocidas por el  que es su dueño y es inmutable.
19. La mente no se ilumina a sí misma porque es perceptible
20. Y no es posible que conozca a los objetos a su propia forma al mismo tiempo.
21. Si fuese perceptible por otra mente tendríamos que suponer una secuencia de intelecciones que se extenderían al in…nito y la confusión de los recuerdos.
22. La conciencia pura e inmutable deviene consciente de su propio conocimiento cuando la mente adopta su forma.
23. La mente teñida por el Vidente y lo visible lo comprende todo.
24. Aunque impulsada por innumerables deseos, la mente obra al servicio del otro ya que se comporta a la manera de un compuesto.
Ultimas etapas hacia la independencia total. 
25. Para quien ha visto la diferencia (entre el Espíritu y la mente) cesa todo deseo de meditación sobre el ser del yo.
26. Entonces la mente se orienta hacia la discriminación y se hace proclive a la independencia.
27. Con intermitencia aparecen otras ideas provenientes de las impresiones latentes.
28. Su destrucción es semejante a la de los impedimentos conforme a lo que se ha dicho antes.
29. En el que trabaja sin apego, incluso respecto a la iluminación, surge el conocimiento discriminador más alto y la concentración nube de virtud”.
30. De ahí la abolición de los impedimentos y del resultado de las acciones.
31. Entonces el conocimiento, purificado de todo impedimento y contaminación, se hace infinito y queda muy poco por conocer.
32. Termina, en este momento, la secuencia de las modificaciones de los elementos constitutivos de la naturaleza habiendo cumplido su objetivo.
33. La secuencia se contrapone al instante y es perceptible sólo al término de las modificaciones.
La independencia total. 
33. La independencia es la disolución de los elementos constitutivos de la naturaleza, vacíos ya de finalidad para el Espíritu. O también el poder de la Conciencia reposando en su propia naturaleza.